Tatuajes de Randy Orton

Pocos espectáculos deportivos mueven tantos millones de dólares la lucha libre en los Estados Unidos. Una disciplina deportiva que la WWE no solo ha conseguido popularizar, sino que también ha hecho posible que luchadores como Randy Orton se hayan convertido en los ídolos de millones de adolescentes norteamericanos.

Randy Orton, madera de campeón

Randal Keith Orton estaba destinado a convertirse en luchador profesional. Nieto e hijo de luchadores de la WWE, el pequeño Randy respiró desde su más tierna infancia lo que era dedicarse en cuerpo y alma a la lucha libre.

Un mundo en el que, como no podía ser de otra manera, entró de la mano de «Cowboy» Bob Orton (su padre) el cual fue su entrenador durante un corto período de tiempo. Tras pasar un año luchando para una pequeña empresa de lucha libre, en el 2001 pasó a formar parte de la WWE.

Después de pasar un año en el programa de entrenamiento de la empresa, Randy comenzó a ser incluido en la nómina de luchadores de SmackDown! , desde el que fue trasladado de forma definitiva a Raw. Allí inició una meteórica carrera, impulsada en gran medida por sus enfrentamientos contra algunas de las leyendas de la WWE, tras los que comenzó a ser apodado como “El Asesino de Leyendas”

Aupado hasta lo más alto, Randy ha sabido aprovechar muy bien sus cualidades físicas y su movimiento estrella, el RKO, ya que ha sido campeón mundial en trece ocasiones, campeón 3 veces de la WWE y campeón mundial de Peso Pesado cuatro veces, además de un gran número de campeonatos por parejas y ganador de diferentes eventos de la WWE.

La colección de tatuajes que Randy Orton acumula en su cuerpo es tan única como su personalidad. Localizados en la parte superior de su anatomía, nos permiten conocer mucho mejor el carácter de este luchador implacable que ha sabido ganarse un sitio en lo más alto de la WWE.

En el antebrazo izquierdo Randy luce el nombre de “Alanna” (su primera hija) junto a su fecha de nacimiento en número romanos.
Sobre el lateral de su dedo corazón izquierdo, el luchador se tatuó el nombre de su mujer, Kim, junto a un corazón.
En los brazos y espalda, el norteamericano posee varios tribales, a los que ha ido agregando detalles con el paso del tiempo.
En la parte posterior de su brazo derecho, Orton se tatuó un versículo de la Biblia que dice: “Sé sobrio, sé vigilante, porque tu adversario, el diablo, como un león rugiente, anda buscando a quién devorar”.
Cubriendo la totalidad de sus brazos, sin tapar sus tribales, Randy se dibujó multitud de calaveras.
En el antebrazo izquierdo posee el único tatuaje al que ha dado color: una rosa roja en honor a su pequeña Alanna.
En la parte superior de su brazo izquierdo lleva una paloma blanca volando.