¿Cómo cuidar un tatuaje una vez hecho?

Después de tanto tiempo planificándolo, horas pensando el mejor diseño y contactando con el artista, finalmente lo conseguiste: un tatuaje reluciente y memorable.

Seguramente estás pensando lo mismo que yo: tomarle una foto y subirlo a las redes sociales. Sí, es una buena idea, pero no tan rápido. Primero tienes que preocuparte por el cuidado posterior del tatuaje.

De hecho, es tan importante, que la calidad del tatuaje dependerá de la preservación. Un tatuaje puede deteriorarse si no sigues los consejos que mencionaremos a continuación.

Ya sea tu primera vez haciéndote un tatuaje, o llevas una que otra visita en el salón, esta publicación sobre cómo cuidar un tatuaje una vez hecho te será de mucha ayuda.

¿Cómo cuidar un tatuaje una vez hecho?

No te retires el vendaje

Cuando el artista finalice los últimos detalles del tatuaje, colocará gelatina humectante, o vaselina, y te vendará el área tatuada. Esta envoltura evitará que los agentes patógenos ingresen en la herida e infecten tu organismo. No te quites la cubierta hasta que se hayan cumplido las horas señaladas por tu tatuador. Ellos saben la importancia de la envoltura y no debes hacer caso omiso ni por incomodidad o curiosidad.

Lavarse las manos antes de tocarlo

Sabemos que lo primero que quieres hacer después de quitarte la envoltura protectora es tocarte el tatuaje. Es algo que nace desde lo más profundo de nuestro ser. No te vamos a decir que no lo hagas, aunque deberías evitar tocar el área tatuada por seguridad, al menos, 24 horas, pero si lo vas a hacer que sea con las manos limpias. Siempre que vayas a tocar el área del tatuaje, lávate las manos usando jabón.

Jabones antimicrobianos e hipoalergénicos

Los especialistas recomiendan lavarse el área tatuada una sola vez al día, empleando jabón hipoalergénico, pensados para cuidar tu piel y no alterar el pH humano, y jabón microbiano, cuya composición previene las infecciones por bacterias.

La técnica es sencilla: frota suavemente el área tatuada con agua tibia y jabón durante unos minutos. No utilices paños para limpiar el tatuaje, ya que puede exfoliar la herida y eso sería contraproducente para el bienestar de tu tatuaje.

Evita tomar alcohol

Una de las recomendaciones que peor se toman las personas después de hacerse un tatuaje es no tomar alcohol. Sonará exagerado, pero es la realidad. En la realización de un tatuaje, la aguja penetra la capa más superficial de la piel y aplica tinta dejando una herida sensible en el proceso. En esos momentos, el sistema inmunológico y linfático trabajan para sanar la abertura, lo que puede tardar semanas. Durante los primeros días, no se recomienda tomar líquidos que debiliten tu sistema, como el alcohol. Esto retrasará la recuperación y te expondrá a infecciones no deseadas. Sé fuerte y espera a que la herida comience a cicatrizar.

Productos para el cuidado del tatuaje

Invertir en productos para el cuidado del tatuaje hará la diferencia entre la cicatrización rápida y la calidad estética de tu tatuaje. Estos artículos son muy beneficiosos: recortan los tiempos de recuperación, mantienen la tinta sólida y brillante, humedece la zona para evitar enrojecimiento y evitan que las bacterias entren por la herida.

Siempre, pero siempre que te hagas un tatuaje, usa una crema o ungüento humectante. En el mercado encontrarás una amplia gama de productos para mantener el área tatuada húmeda, como por ejemplo bepanthol, quien cuenta con diferentes artículos para proteger un tatuaje en los días posteriores a su realización.

La relación bepanthol tatuajes es significativa, especialmente cuando el área se encuentra seca, que es donde proliferan los efectos secundarios no deseados: descamación, irritaciones y enrojecimiento. Estos productos lo que hacen es proporcionar la cantidad de líquido adecuada para restituir la homeostasis de la piel.

Eso sí, no te apliques demasiado. Una fina capa de crema humectante será suficiente. Demasiada pomada obstruye los poros y crea erupciones.

Si lo que quieres es crear una capa protectora, regenerar la piel tras el tatuaje y mantener la hidratación en niveles saludables, entonces te recomendamos eucerin aquaphor, ideal para pieles sensibles.

No rascarse ni picarlo

Este consejo, seguramente, será el que más te cueste seguir: no te rasques ni pellizques el tatuaje. Sabemos que, cuando el tatuaje está recién hecho, la incomodidad e irritación es incontrolable. Tu mente trabaja, inconscientemente, para llevar las manos al área y rascarse.

Aún si es contra voluntad, tienes que ser más fuerte que tu cerebro y no rascarte por nada del mundo. Esa zona se encuentra hipersensible y si la picamos, se inflamará e irritará más. Ni hablar que puedes infectarlo si lo haces con las manos sucias.

Protector solar

Finalmente, queremos hablar sobre algo de lo que muchos clientes, especialmente los primerizos, suelen quejarse: el estado del tatuaje pasado un tiempo de la última sesión.

Los minutos que proceden a cuando al artista dice ‘listo’, tu tatuaje lucirá en su máximo esplendor: brillante y reluciente. Aquí es cuando más feliz estamos de tomar la decisión de tatuarnos. Pero, debes saber que no durará para siempre. Esa nitidez se desvanecerá con el tiempo.

Con el pasar del tiempo, y por agentes externos, como el sol y los productos utilizados, experimentará cambios importantes.

Esto será más o menos dramático si usas productos para proteger a tu tatuaje, como protectores solares, que mantienen los colores latentes. Es una manera de postergar la calidad de tu diseño entintado por más tiempo.

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